La inflación en Brasil se mantuvo alta en marzo de 2023

La inflación en Brasil se mantuvo elevada incluso durante el mes de marzo de 2023, debido principalmente a la subida del precio de la gasolina. De hecho, la inflación ha vuelto a hacer resurgir los problemas del coste de la vida en Brasil.

Teniendo en cuenta el estancamiento de la economía brasileña, lo más probable es que se produzcan más desacuerdos sobre la política económica del país.

En su mayor parte, los precios al consumo durante el tercer y cuarto trimestre de 2022 se enfriaron debido a la agresiva política del banco central. Pero tras la toma de posesión del nuevo presidente en 2023, ¡la presión inflacionista volvió de nuevo!

Tras el reciente informe de inflación de Brasil, los analistas creen que cualquier posibilidad de relajación de la política se retrasará hasta finales de 2023. Lo que se espera de Brasil es un enfoque más restrictivo.

La lectura del IPCA para marzo es del 0,77%

El IPCA, que es el índice de referencia de los precios al consumo en Brasil, aumentó un 0,77% durante el mes de marzo. Este dato coincide con el de la mayoría de los economistas.

En general, la inflación de los alimentos en Brasil se mantuvo baja durante este mes en comparación con el mismo periodo del año pasado. Sin embargo, la reanudación de los impuestos sobre el etanol y la gasolina ha pasado factura y se hará visible en los informes de inflación.

Por el momento, el tipo de referencia en Brasil se sitúa en el 13,75%, y parece que la elevada inflación hará difícil que el Banco Central do Brasil modifique este tipo.

Si tenemos en cuenta la inflación de marzo (0,77%), la tasa acumulada del primer trimestre es del 2,2%. En otras palabras, es probable que el ritmo actual de inflación supere el objetivo del 3,25% fijado para este año.

Precisamente la semana pasada corrían rumores de que el Gobierno introduciría recortes de tipos muy pronto. Pero tras la reciente lectura y comentarios del gobernador del banco central de Brasil, parece que sólo eran rumores.

Según el ministro de Finanzas y el jefe del Banco Central de Brasil, el impuesto sobre el combustible mejorará los ingresos del Gobierno y también reducirá la inflación del país.