Wall Street registra su mayor pérdida en dos años tras la publicación del Cpi
Tras la publicación de los datos del IPC, las acciones estadounidenses terminaron en una amplia tendencia vendedora que incluso arrastró también a Wall Street a la baja. El informe de inflación fue tan malo que acabó con cualquier esperanza de que la Reserva Federal ralentizara el endurecimiento de su política monetaria. Ahora parece que la Fed mantendrá su postura de línea dura durante los próximos meses.
Tras la publicación de los datos del IPC, los 3 principales índices bursátiles de EE.UU. rompieron su racha ganadora de 4 días. De hecho, ¡todos estos índices terminaron registrando sus mayores caídas porcentuales en un día desde 2020! La última vez que vimos una caída como esta, fue debido a la pandemia del COVID-19.
El sentimiento de los inversores es negativo
El último informe del IPC ha vuelto negativo el sentimiento de los inversores y ha enviado una ola de risk-off a los mercados. Como resultado, los valores tecnológicos como Apple, Microsoft y Amazon fueron los que más perdieron. Estos valores suelen ser sensibles a cualquier aumento de los tipos de interés.
Teniendo en cuenta que los mercados estaban subiendo antes de la publicación, era natural que se produjera esta venta masiva. Estas fueron las opiniones de un famoso gestor de carteras de Chicago.
El Departamento de Trabajo publicó los datos del IPC y puso de manifiesto que la inflación sigue al alza. Anteriormente, la opinión general era que la inflación se estaba enfriando y que descendería lentamente. Pero en realidad ocurrió lo contrario.
El IPC subyacente, que no incluye los precios de la energía y los alimentos, también experimentó un rápido aumento: antes se situaba en torno al 5,9%, pero en julio aumentó hasta el 6,3%.
De la lectura se desprende que la inflación es ahora un problema persistente, lo que significa un compromiso de la Fed durante mucho tiempo. Para la renta variable, son malas noticias, se mire como se mire.
En los últimos 6 meses, los tipos de interés han subido alrededor de un 3%. Los expertos creen que el impacto exacto de estas subidas de tipos está aún por llegar.
