El FMI cree que la fragmentación afectará al PIB mundial
Han pasado décadas desde que asistimos a un aumento de la integración económica. Pero ahora, la economía mundial corre el riesgo de sufrir una grave fragmentación debido a multitud de riesgos. Por ello, existe la posibilidad de que la economía mundial disminuya un 7%.
De hecho, hay muchos países en los que la pérdida de producción económica rozará entre el 8% y el 12%. Este escenario podría hacerse realidad si se produce el desacoplamiento de la tecnología, según un nuevo informe del FMI.
Además, el informe también reveló que, en caso de fragmentación limitada, se produciría una disminución del 0,2% del PIB mundial. Pero el FMI también dejó claro que era necesario seguir trabajando para evaluar adecuadamente los daños a la GFSN y al sistema monetario internacional.
La globalización está en peligro
Según el informe del FMI, los factores que están poniendo en riesgo el crecimiento económico mundial son la guerra entre Rusia y Ucrania y la pandemia del COVID. De hecho, estos factores están poniendo en peligro la globalización, un fenómeno que ha cambiado totalmente el funcionamiento del comercio y las economías de todo el mundo.
El FMI afirmó que los profundos lazos comerciales debidos a la globalización condujeron a una reducción de la pobreza en todo el planeta. Como resultado, los consumidores pertenecientes a la franja de bajos ingresos se beneficiaron de los precios más bajos.
Pero el aumento de los riesgos en torno al sentimiento global y el deterioro de los lazos comerciales afectarán a los mismos consumidores. De hecho, los países en los que la mayoría de los ciudadanos pertenecen a los segmentos de renta baja serán los más afectados.
Para empezar, una restricción de la migración transfronteriza provocará una disminución de las remesas. Además, es probable que también se produzca una reducción de la IED (inversión extranjera directa) al reducirse los flujos de capital. Del mismo modo, la cooperación internacional también está en declive, lo que aumenta los precios de los bienes públicos.
Por eso, el FMI cree que si la fragmentación se acentúa, acarreará mayores costes en el frente económico.
Y los países que corren más riesgos son los que pertenecen al mercado de bajos ingresos y, sobre todo, los de los mercados emergentes.