La inflación del IPC australiano fue del 6% en junio; aumentan las posibilidades de una pausa del RBA
Por fin tenemos los resultados de los datos del IPC australiano, que muestran que el crecimiento del índice fue muy inferior al previsto en el 2º trimestre. Esto aumentará las posibilidades de una pausa en el ciclo de subidas de tipos del RBA.
En general, se registró un crecimiento del 0,8% en la inflación del IPC de Australia en comparación con el trimestre anterior. Por el contrario, los expertos preveían un crecimiento de la inflación IPC del 1%. Del mismo modo, la inflación del IPC del primer trimestre también se situó en torno al 1,4%, lo que nos indica que la inflación se ha ralentizado.
Inflación en mínimos anuales
En general, la lectura del IPC de Australia se encuentra en mínimos de varios años, ya que estos valores se vieron por última vez en septiembre de 2021. Esto también dará un amplio margen para que el RBA se tome una pausa, ya que cualquier nueva subida de tipos afectará al consumo local.
Tras la reciente lectura, la inflación del IPC de Australia se sitúa ahora en el 6% anual, por encima de las expectativas del 5,4%. Sin embargo, sigue siendo inferior al 7% del primer trimestre.
Según los expertos, la lectura del IPC fue suave, lo que indica que los tipos de interés introducidos por el Banco de la Reserva de Australia están dando sus frutos. Esto también ha reforzado los argumentos a favor de una pausa en las subidas de tipos.
Tras la lectura del IPC, el dólar australiano (AUD) cayó un 0,7%, ahora que las posibilidades de que se produzcan más subidas de tipos son muy escasas. Hace apenas un mes, el Banco de la Reserva de Australia decidió mantener los tipos de interés sin cambios, lo que decepcionó a muchos agentes del mercado.
Aunque la inflación del último trimestre ha sido suave, la inflación anual en Australia sigue siendo superior al objetivo del 2% del RBA. Para empezar, la hinchazón y los costes de los alquileres en Australia siguen siendo elevados, así como los tipos hipotecarios.
De cara al futuro, es probable que el RBA siga un planteamiento de espera mientras intenta evaluar los efectos de las subidas de tipos sobre la inflación.